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Cuchillos plegables di Abel Domenech -Argentina

Cuchillos plegables di Abel Domenech  -Argentina

 

Autore: Abel Domenech

Tipologia: Rassegna Stampa

Dimensione: cm 25 x cm 25

Disponibilità: non disponibile

Prezzo: € 90,00

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Cuchillos plegables di Abel Domenech -Argentina

<p>Interessantissimo libro dello scrittore argentino&nbsp;Abel Domenech,uno dei massimi studiosi di coltelli e armi nel mondo.</p> <p>Da segnalare il capitolo sui coltelli sardi le cui foto sono nella maggior parte riconducibili a coltelli venduti da me ad Abel Domenech&nbsp;nel corso degli anni come le pattade di Barore Brundu o i coltelli di Francesco Porcu di Norbello, Giuseppe Galante etc</p> <p>Ampio spazio &egrave; poi dedicato ad Antonio Montejano,incisore spagnolo di&nbsp;rara raffinatezza</p> <p>INTERVISTA AD ABEL DOMENECH :</p> <p>Armas Blancas: Entrevistamos a Abel A. Dom&eacute;nech,</p> <p> El argentino Abel A. Dom&eacute;nech es un aut&eacute;ntico experto en materia de armas blancas. Reconocido a nivel internacional, el se&ntilde;or Abel Dom&eacute;nech ha publicado en lengua espa&ntilde;ola 5 libros dedicados a la cuchiller&iacute;a. Con &eacute;l hemos hablado largo y tendido sobre lo que &eacute;l mismo denomina su &ldquo;pasi&oacute;n fierrera&quot;. -&iquest;De d&oacute;nde viene su afici&oacute;n por los cuchillos y las armas de fuego en general?</p> <p> No puedo precisar con exactitud el origen o cu&aacute;ndo prendi&oacute; en m&iacute; la &ldquo;pasi&oacute;n fierrera&quot;. Creo firmemente que este tipo de pasiones vienen con uno en los propios genes, y luego, en determinado momento de nuestras vidas, y por algunas circunstancias particulares, se desatan. Recuerdo mis juegos de mi temprana y ya lejana ni&ntilde;ez, pretendiendo imitar a los cowboys de los westerns o los detectives de la TV, y mis rev&oacute;lveres, pistolas y pistoleras de juguete. Tambi&eacute;n recuerdo mis visitas a las vidrieras de las cuchiller&iacute;as, admirando aquellas joyas prohibidas a mi edad, que me hac&iacute;an sus gui&ntilde;os con el brillo de sus filos y hojas pulidas. Y mis primeros pasos tirando con mi primer riflecito de aire comprimido, regalo de mi padre cuando ten&iacute;a 10 u 11 a&ntilde;os, y m&aacute;s tarde, con una carabina del .22LR, prestada por un amigo, a los 14 o 15 a&ntilde;os. Y tambi&eacute;n mi primer cuchillo, que s&oacute;lo se me permit&iacute;a usar para &ldquo;churrasquear&quot; porque ten&iacute;a unos 8 a&ntilde;os cuando mi padre me lo regal&oacute;.</p> <p> Mi verdadera pasi&oacute;n se desat&oacute; a los 24 o 25 a&ntilde;os, con la compra de una carabina Winchester .22 semiautom&aacute;tica, y una pistola Bersa del mismo calibre, y con mi primer cuchillo &ldquo;importante&quot;: un Randall Modelo 3 de caza. Desde entonces, han pasado unos 35 a&ntilde;os, durante los cuales me dediqu&eacute; al coleccionismo, a la investigaci&oacute;n, y a mi tarea de escritor especializado en armas de fuego y cuchiller&iacute;a, con la publicaci&oacute;n de cientos de art&iacute;culos sobre armas y cuchillos, en diferentes revistas de mi pa&iacute;s (Argentina), de Brasil, EE.UU., Espa&ntilde;a, y Francia.</p> <p> -&iquest;Cu&aacute;ntos cuchillos figuran en su colecci&oacute;n?, &iquest;a cu&aacute;l de todos ellos le tiene mayor estima?</p> <p> No podr&iacute;a precisar cu&aacute;ntos, pero seguro que son muchos... muchos. Imag&iacute;nese qu&eacute; puede hacer la pasi&oacute;n de un coleccionista despu&eacute;s de 30 a&ntilde;os de dedicaci&oacute;n, de visitar pa&iacute;ses, conocer artesanos, fabricantes, otros coleccionistas colegas&hellip; Mis intereses tambi&eacute;n han ido variando, a medida que avanzaban mis investigaciones para cada uno de mis libros, y as&iacute; me he volcado alternativamente, a los artesanales, a los militares y de combate, a los criollos o gauchos, a las navajas y plegables, etc. Piezas compradas, otras que son producto de trueques entre coleccionistas, otras muchas, regalos de amigos y familiares conocedores de mi afici&oacute;n, de artesanos y de fabricantes, como recuerdo de una visita, de un art&iacute;culo publicado, o m&aacute;s importante, como testimonio de una amistad, integran mi colecci&oacute;n.</p> <p> -&iquest;Cu&aacute;l es la pieza que m&aacute;s le ha costado conseguir (tanto a nivel econ&oacute;mico como a nivel de b&uacute;squeda)?</p> <p> R&eacute;plica actual de un bowie estilo ingl&eacute;s del siglo XIX Esta es otra pregunta muy dif&iacute;cil de responder. Hay piezas que pueden tener un alto precio, pero que despu&eacute;s de todo se pueden adquirir con s&oacute;lo ingresar a una buena cuchiller&iacute;a, si uno tiene el dinero necesario. Otras piezas requieren de tiempo, mucho tiempo, para esperar que aparezcan en el mercado, y a veces no es posible adquirirlas. Luego sucede un hallazgo inesperado, d&oacute;nde y cu&aacute;ndo uno menos lo espera. El tiempo y la paciencia son fundamentales en el coleccionismo. Yo no poseo piezas de precios muy altos, de esos que nos hacen asombrar al escuchar la cifra, porque sencillamente, no soy un hombre rico. Pero en tanto tiempo de transitar el mundo del coleccionismo he tenido la suerte de poder hacerme de alguna pieza verdaderamente interesante, digna de una gran colecci&oacute;n. Y esto ha sido por haber tenido mucha suerte, y como suele decirse, por estar en el lugar adecuado en el momento justo. Esas piezas est&aacute;n fotografiadas en mis libros y prefiero que quienes recorran sus p&aacute;ginas, los descubran all&iacute; mismo. Inmortalizadas para siempre entre tantos recuerdos, vivencias y experiencias.</p> <p> Hay piezas sin embargo que sin ser ni muy caras ni muy raras, tienen un valor muy especial para m&iacute; por el lugar donde las encontr&eacute;, por la persona a la que se las adquir&iacute;, o por quien me las obsequi&oacute;. He tenido la suerte de viajar mucho, tratando de conocer lugares y personas vinculadas con mi pasi&oacute;n por armas de fuego y cuchillos: Albacete, Toledo, Thiers, Laguiole, Solingen, el taller de Randall en Orlando, Florida, San Antonio, Texas, o Hartford, Connecticut, el lugar donde vivi&oacute;, trabaj&oacute; y ahora descansa Samuel Colt&hellip; son algunos de esos lugares de donde tengo un recuerdo en mi memoria y en mi coraz&oacute;n, y alguna pieza para motivar ese recuerdo.</p> <p> -&iquest;Por qu&eacute; cree que el cuchillo Bowie es uno de los m&aacute;s famosos del mundo?, &iquest;qu&eacute; caracter&iacute;sticas le han aupado a lo m&aacute;s alto?</p> <p> Colecci&oacute;n de bowies antiguos del siglo XIX El bowie es una tipolog&iacute;a de cuchillo que aparece en el territorio norteamericano desde finales del siglo XVIII, pero que reci&eacute;n adquiere su nombre de tal, y su renombre y fama, a partir del uso que le diera Jim Bowie, un oscuro personaje de la frontera norteamericana, famoso por su habilidad para pelear con su cuchillo de gran tama&ntilde;o, y que actu&oacute; hacia los a&ntilde;os 1820. Su cuchillo pas&oacute; a ser famoso especialmente despu&eacute;s de su muerte en la batalla de El &Aacute;lamo, en 1836. Poco m&aacute;s tarde, el cuchillo de Bowie es reinterpretado por los artesanos americanos de la &eacute;poca, y fundamentalmente, por la industria cuchillera de Sheffield, que aprovecha con muy buenos resultados econ&oacute;micos, la fama y la demanda de este tipo de cuchillos. Sin embargo, la &eacute;poca de oro del bowie fue muy ef&iacute;mera, sucumbiendo ante el perfeccionamiento y mejora de la fiabilidad del arma de fuego, ocurrida hacia la segunda mitad del siglo XIX, con la aparici&oacute;n del cartucho met&aacute;lico. Para los a&ntilde;os 1870, el bowie reduce su tama&ntilde;o y se convierte de herramienta y arma blanca, en un cuchillo de caza.</p> <p> Claro, a mediados del siglo XX, viene el rescate de la historia de Jim Bowie, por parte de la novela primero, y de los coleccionistas y primeros investigadores despu&eacute;s, hacia 1950. Le siguen el cine, la televisi&oacute;n, y la mecha de la inmortalidad est&aacute; encendida, y estalla de la mano de los grandes coleccionistas norteamericanos, a partir de los a&ntilde;os 1970 en adelante. La caracter&iacute;stica decisiva de la fama y popularidad de la que goza en la actualidad, puede residir en gran parte en la belleza y variedades de su dise&ntilde;o, que no es &uacute;nico como suele creerse. Pero fundamentalmente, en lo colorido de su historia, la del personaje que le cedi&oacute; su nombre y en el periodo de la conquista del oeste en que fue empleado. Todo ello recreado, ensalzado y exportado al mundo por novelistas, guionistas, fabricantes, artesanos y creativos comerciantes de los EEUU.</p> <p> -Bowie o Randall: &iquest;con cu&aacute;l de ellos se quedar&iacute;a y por qu&eacute;?</p> <p> Cuchillos Randall de combate</p> <p> Es dif&iacute;cil proponer esta alternativa, puesto que el bowie es una tipolog&iacute;a, estrictamente hist&oacute;rica hoy en d&iacute;a, o tal vez, un estilo si queremos verlo as&iacute;. Mientras que Randall es actualmente una marca, con mucha leyenda, originada en un visionario, Bo Randall, y mantenida vigente en la actualidad por su hijo y nietos, en una operaci&oacute;n que mantienen en Orlando, Florida. Por cierto, que Randall ofrece bowies entre su amplia gama de modelos, que incluye variedades para todos los gustos y actividades. Randall tuvo la virtud de crear, sin propon&eacute;rselo, todo un movimiento, que es el de la cuchiller&iacute;a artesanal a nivel mundial. Adem&aacute;s, impuso un estilo propio, porque si bien comenz&oacute; copiando a un cuchillero de su &eacute;poca, William Scagel, le dio una vuelta de tuerca creativa a la genialidad de Scagel. Sus dise&ntilde;os son considerados hoy d&iacute;a como verdaderos cl&aacute;sicos, y fueron copiados y vueltos a copiar. Bo Randall inspir&oacute; a muchos de los m&aacute;s famosos artesanos cuchilleros de la actualidad. Los cuchillos Randall son seguidos y perseguidos por una enorme cantidad de coleccionistas de todo el mundo, que no dudan en soportar los casi 10 a&ntilde;os de espera que supone adquirir un Randall directamente de su taller, consolidando su fama y su popularidad. Luego, regresando a su pregunta inicial: como coleccionista de piezas antiguas, y por su colorida historia, no dudo en responder &ldquo;un bowie&quot;; y como usuario, o tal vez como coleccionista de cuchillos modernos, no dudar&iacute;a en elegir o recomendar un Randall.</p> <p> -En su web asegura que la firma Spyderco fue la precursora de los cuchillos plegables modernos. &iquest;Qu&eacute; ventajas presentan estos cuchillos plegables respecto a los modelos tradicionales?</p> <p> Efectivamente, siento que es as&iacute;. A pesar de que sus dise&ntilde;os y formas no son convencionales, y ni siquiera podr&iacute;amos calificarlos de bonitos, no hay duda de su funcionalidad, de su dise&ntilde;o racional, del buen compromiso de precio y muy alta calidad constructiva y de materiales que poseen. Luego, han impuesto caracter&iacute;sticas que fueron presentadas originalmente por esta marca, y que despu&eacute;s fueron adoptadas por todos, absolutamente todos, los fabricantes de cuchillos de hoja plegable de la actualidad. Fundamentalmente, el clip, la apertura con una sola mano, el uso de diferentes sistemas de bloqueo muy fiables, la popularizaci&oacute;n del filo dentado (perlado), el uso de materiales muy modernos para empu&ntilde;aduras, y de aceros de &uacute;ltima tecnolog&iacute;a para las hojas. Todo ello puede el lector apreciarlo en cualquier plegable moderno, pero no exist&iacute;a antes de Spyderco.</p> <p> -En los &uacute;ltimos a&ntilde;os, firmas como la italiana Extrema Ratio est&aacute;n fabricando cuchillos de alta gama a un precio elevado. &iquest;Qu&eacute; le parece esta apuesta comercial?</p> <p> Cuchillos plegables de la firma estadounidense Spyderco Me parece una apuesta muy arriesgada para una empresa comercial, pero al mismo tiempo advierto que lo est&aacute; haciendo con mucho &eacute;xito, y bien merecido por cierto. Arriesgado, porque ya he comentado sobre la posici&oacute;n de una industria, y su meta de maximizar beneficios, y cuando se presenta un producto de alta gama y alto precio, con tanta competencia en modelos, or&iacute;genes, y precios en el mercado, siempre existe el riesgo de no encontrar el nicho de mercado que se busca. Ex Ratio parece haberlo encontrado. Sus productos poseen un dise&ntilde;o muy distintivo, de vanguardia, que inspiran la sensaci&oacute;n que luego es comprobada, de gran solidez. El dise&ntilde;o a la vez que atrevido, a veces futur&iacute;stico, es sin embargo, pr&aacute;ctico para los fines que fue creado, y se asocia con el empleo de materiales de gran calidad en su construcci&oacute;n. El nicho del usuario de un producto de alta calidad y gran dise&ntilde;o, y dispuesto a pagar un alto precio, existe por lo visto, y fue detectado por Ex Ratio, que tambi&eacute;n consigui&oacute; la respuesta positiva y favorable del sector militar, especialmente en grupos especiales, dotaciones de helic&oacute;pteros, o grupos de salvataje. En materia de plegables de tipo &ldquo;t&aacute;ctico&quot;, creo personalmente que sus productos son verdaderamente revolucionarios, y que poseen un gran dise&ntilde;o y gran calidad constructiva.</p> <p> -Para concluir, &iquest;c&oacute;mo ve las perspectivas de futuro del negocio de la cuchiller&iacute;a?, &iquest;hacia qu&eacute; direcci&oacute;n considera que debe enfocarse para seguir creciendo?</p> <p> Plegable t&aacute;ctico de B&ouml;ker dise&ntilde;ado por Jim Wagner Yo no soy un experto en el aspecto comercial de la industria cuchillera, por lo cual solo puedo opinar &ldquo;desde afuera&quot;, como un observador de varios fen&oacute;menos. Por un lado, veo el peso que tiene la competencia de la industria oriental, con precios incre&iacute;blemente bajos y una calidad m&aacute;s que aceptable para el usuario medio de cuchiller&iacute;a. No tanto para el profesional que usa un cuchillo en su actividad, o para el verdadero conocedor o coleccionista, pero s&iacute; para el resto de los consumidores. Esta competencia es obviamente resistida y vista con ojos atentos y preocupados por las industrias localizadas en lugares tradicionales como Albacete, Thiers, Solingen o Scarper&iacute;a. Pero curiosamente, as&iacute; como &ldquo;combaten&quot; al embate oriental incorporando nuevas tecnolog&iacute;as productivas y ofreciendo dise&ntilde;os revolucionarios y nuevos materiales, y hasta se realizan alianzas entre estas famosas regiones cuchilleras nombradas para resistirlas en conjunto, son los propios fabricantes de esos lugares de Europa quienes permiten el &ldquo;filtrado&quot; de la temida presencia oriental, al crear l&iacute;neas de comercializaci&oacute;n o de producci&oacute;n que importan y ofrecen en sus propios cat&aacute;logos, con lo cual alimentan y fomentan el crecimiento de aquella industria. Esto de ninguna manera pretende ser una cr&iacute;tica por mi parte, puesto que ya dije que no soy un experto, y adem&aacute;s los due&ntilde;os y conductores de estas empresas europeas saben mejor que yo lo que hacen, pero no deja de llamarme poderosamente la atenci&oacute;n esta dualidad que existe.</p> <p> Por otro lado, el alto desarrollo tecnol&oacute;gico de producci&oacute;n y dise&ntilde;o alcanzado por la industria cuchillera de producci&oacute;n masiva y en grandes vol&uacute;menes, crea parad&oacute;jicamente -y afortunadamente por cierto- un nicho, una brecha, que da lugar al desarrollo de la cuchiller&iacute;a artesanal, cuya producci&oacute;n va dirigida fundamentalmente al coleccionista o al usuario conocedor y exigente, pues brinda ciertas caracter&iacute;sticas que la cuchiller&iacute;a industrial no puede brindar: la personalizaci&oacute;n, la exclusividad, la pieza &uacute;nica, el embellecimiento con grabados, y otras decoraciones, el uso de materiales exclusivos en el encabado, o el prestar gran atenci&oacute;n a detalles de gran fineza en el acabado o en el dise&ntilde;o. Todas ellas, caracter&iacute;sticas que se alejan de las posibilidades de la cuchiller&iacute;a industrial por su concepci&oacute;n misma, pero que seguramente son apreciadas por el amante de la cuchiller&iacute;a de alta calidad. Por tanto, la cuchiller&iacute;a artesanal no es competencia de la industrial, sino que se complementan perfectamente y sin interferirse en absoluto.</p>
 
 
 
 
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